viernes, 20 de agosto de 2010

Autoestima y creatividad

La autoestima se define como el valor que se suele dar una persona como valiosa. También se le conoce como "amor propio".
Advertencia: No debe confundirse con narcisismo o egoísmo.
La autoestima está íntimamente relacionada con la creatividad. De hecho, una persona con autoestima alta puede desarrollar cosas nunca antes vistas ya que considera que puede ser tomado en cuenta.
Para mantener la autoestima alta, es necesario motivar al niño de forma positiva. Ello implica:
  • En el caso de aplicar disciplina sólo debe ser reprendida la conducta, no al niño. Ejemplo: es mejor decir "Lo que hiciste estuvo mal hecho, pero aún así te sigo queriendo" en vez de "¡Muchacho del carrizo, eres un inútil, nunca vas a servir para nada, irás a vivir en la m...!"
  • Si el niño sabe dibujar es bueno estimularlo con frases como "¡Qué bien lo hiciste!" en vez de decirle "¿Qué es ese mamarracho?" O peor aún: echar a la papelera sus "obras".
  • Es bueno que los padres apliquen estrategias más asertivas como: responsabilizar, dar ánimos, anticipar, etc., en lugar de imponer normas severas, dar órdenes, moralizar, exigir, etc.
  • Es mejor dejar que la persona se equivoque para así aprender de sus errores. De hecho se dice popularmente que "equivocándose uno aprende rápido". Si se le reprende severamente aun cuando haya sido una falta leve puede desarrollarse inseguridad, temores y dudas.

No obstante, algunas personas pueden hacer cosas indebidas sin quererlo, por lo cual no comprenden por qué se les disciplina. Es el caso de quienes sufren de discapacidades psicosociales como el autismo o el síndrome de Asperger. Estas personas ameritan un cuidado especial, estimulándolas de acuerdo con sus capacidades y/o limitaciones.